La entrega de la cocaína ha ido bien y Roque está de vuelta. Pero a pesar del éxito, Roque y Oli deciden abandonar el narcotráfico. Sito decide acatar su voluntad. ¿Es el final de la ROS? Beigbeder se reúne con el Secretario de Justicia, intentando concienciarle del problema del contrabando en Galicia. Es necesaria una ley para que las fuerzas del orden puedan luchar de manera efectiva contra ese enriquecimiento ilícito y poder así entrar en la UE. Pasan los meses y esa ley contra el contrabando de tabaco finalmente se aprueba. La cooperativa de contrabandistas sigue amasando dinero cuando se enteran de esta nueva ley. No contaban con las injerencias de otros políticos que no fueran de la Xunta. Oubiña tantea, ya que pueden ir a la cárcel por el tabaco, ¿por qué no pasarse a las drogas? Es la misma pena, diez veces el beneficio. Pero Terito es tajante: nada de drogas bajo su mandato. ¿Acatarán Oubiña y el resto la decisión de Terito? ¿Se enterarán de que Sito ya anda metido en el mundo de la cocaína? Mientras, la investigación del sargento Darío Castro aumenta el nivel: el juez Beigbeder ha autorizado un sistema de escuchas. ¿Qué podrá obtener espiando a Terito y los suyos? ¿Logrará que no exista ninguna filtración entre los guardias a sueldo de los narcos?